El ciruelo procede de Asia. Estos árboles son de hoja caduca, de ramas abiertas y de copa esférica. En otoño las hojas, medianas y aserradas, se tornan de colores cobrizos y rojos, mientras que en marzo, cuando despierta la primavera, las flores, que salen antes que las hojas, llenan los huertos de profusos tonos blancos y rosados. Su corteza es de color oscuro y lisa. El fruto llega en verano, con dos variedades, generalmente amarillas y rojas.

El duraznero (o melocotonero) es un frutal hermoso por sus flores en primavera y sus deliciosos frutos en verano. Este árbol puede alcanzar una altura de 6 metros, su corteza es lisa y cenicienta. Sus raíces son ramificadas y superficiales. Sus flores de color rosa a rojo miden de 2 a 5 cm de diámetro y nacen a finales del invierno y principios de primavera. Su fruto llamado durazno, piesco o melocotón contiene una única semilla encerrada en una cascara.

Su desarrollo es lento y crecen principalmente en bosques templados. El árbol alcanza hasta los 15 metros de altura y dispone de un tronco corto de corteza quebradiza. Su silueta de copa redondeada se puede ver sobre todo en los campos castellanos y andaluces y ofrece una sombra amplia y compacta.

El limonero es un frutal perenne de porte mediano del género citrus, perteneciente a la familia de las rutáceas, que puede llegar a vivir 70 años. De origen asiático, en la actualidad crece en zonas de clima templado. Gracias a sus flores de azahar, brindan un aroma irresistible, además de ofrecernos sombra y frutos.

El mandarino es más resistente al frío y más tolerante a la sequía que el naranjo, pero los frutos son sensibles. El factor limitante es la temperatura mínima, ya que no tolera las inferiores a 3ºC. Las temperaturas altas constantes mantienen altos niveles de clorofilas y su color es persistentemente verde.

El árbol de mango puede crecer hasta 30 a 45 pies de altura con una corona de propagación de 30 a 40 pies. Este cultivador rápido tiene una cubierta redondeada, que es muy denso, haciendo que el árbol de mango de hoja perenne y sombra excelente también. Las hojas jóvenes son de color violeta rojizo o bronceado, posteriormente se tornan de color verde oscuro.

Estos árboles crecen de 25 a 50 pies (7,62 a 15,24 mts) de altura y proporcionan un follaje verde oscuro, flores y una cosecha plena la fruta durante el verano para los jardineros que cuidan de ellos. Sin embargo, sin la cantidad adecuada de sol y la nutrición, los naranjos no van a florecer y ni a crecer sus naranjas.

Los arboles de níspero son pequeños arboles de hoja perenne, con copa redondeada o grandes arbustos con troncos cortos. Por lo general, el árbol crece hasta una altura de alrededor de 10 pies. Muchas veces estos arboles se utilizan como plantas ornamentales. Una vez polinizadas, las flores en frutos de níspero, puede estar en cualquier lugar entre 1 a 2 pulgadas de largo.

Natural de los bosques europeos, sobre todo predominante en el suroeste del continente, el nogal es un árbol que se identifica fácilmente con el clima y la cultura mediterránea. En España se localiza en las zonas bajas del norte y en las montañas del sur de la Península. Su madera es muy apreciada por su belleza y calidad, y su fruto, la nuez, que madura entre agosto y octubre, es un alimento muy común y apreciado en la cocina.

La papaya es un árbol americano nativo autóctono de un amplio rango que incluye la llanura costera del Golfo y Michigan del sur. Botánicamente conocido como Asimina triloba, el árbol produce una fruta similar a la chirimoya de 5 a 16 onzas (0,14 a 0,45 kg) que maduran de mediados de agosto a octubre.

El peral es un árbol frutal originario de Asia y de Europa del Este. Es de hoja caduca y puede crecer hasta 20 metros en la naturaleza. También es parte de los árboles frutales que tienen la mayor longevidad. Florece en abril, mes en el que produce inflorescencias blancas y rosadas. Se lo suele plantar en el jardín por su fruto carnoso y jugoso, la pera. Su porte lo coloca también entre las especies ornamentales.